Expresar o engañarse

Un autoengaño disfrazado
de sinceridad
y un discurso vacío,
atestado de artificialidad.
No permitiendo que
nadie vea el desorden,
ni los errores,
ni los miedos.
Sobre todo los miedos.
Porque tener miedo da vergüenza.
Tener miedo, de hecho,
es una vergüenza.
Y porque nadie lo vea
y porque nadie se entere,
las palabras salen a borbotones,
huecas y deshabitadas.
O, por lo menos, así se oyen.
Expresar o engañarse.
Entre dos opciones igual
de infortunadas,
me pregunto,
¿cuál es la menos inviable?
Escritos Febriles
Gente de plástico y conversaciones hechas de humo